1.La cruz no será más pesada,
Que la gracia que El me da:
Y si la tormenta me espanta,
No podrá esconder su faz.
Coro:
La gracia de Dios me bastará:
Su ayuda jamás me faltará,
Consolado por su amor
Que echa fuera mi temor,
Confiaré en mi señor.
2.Mi cáliz nunca es tan amargo,
Como el de Getsemaní;
En mis días más apurados
No se aparta Dios de mí.
3.La luz de su rostro me alumbra,
En el tiempo de aflicción;
Y mi alma gozosa vislumbra
El palacio de mi Dios.