Junto a la cruz de Cristo

 


Junto a la cruz de Cristo yo quiero siempre estar,
pues mi alma albergue fuerte y fiel allí puede encontrar.
En medio del desierto aquí, allí encuentro hogar,
do del calor y del trajín yo pueda descansar.


Bendita cruz de Cristo, a veces veo en ti la misma forma
en fiel visión del que sufrió por mí.
Hoy mi contrito corazón confiesa la verdad,
de tu asombrosa redención y de mi indignidad.


Oh Cristo, en ti he hallado completa y dulce paz;
no busco bendición mayor que la de ver tu faz.
Sin atractivo el mundo está, ya que ando por tu luz;
avergonzado de mi mal, mi gloria es ya la cruz.